Ilusiones perdidas


Mientras en Murcia más de 29472 personas se afanan en opositar para conseguir una de las 1534 plazas de funcionarios (entre los que dudo se encuentre alguno de los tocapelotas que tanto nos odian) en la Rioja un compañero acaba de recibir una sentencia que acusa a su jefe de acoso laboral. 70.000 euritos de indemnización por depresiones causadas ante contínuas maniobras de hostigamiento. Os aseguro que si el personaje (el acosador) en cuestión los tuviese que poner de su bolsillo otro gallo cantaría.

Pero los desencantos de esta profesión (y que intuyo sólo vemos nosotros) están a la orden del día. Otra compañera con un espléndido blog ha recogido con precisión la situación que se vive dentro de la Junta de Andalucía, donde existen situaciones incomprensibles que menoscaban la ilusión y ganas de trabajar. Por cierto, en este mismo blog su autora abre su alma ante su reciente ruptura y no estaría nada mal poner nuestro granita de arena y enviarle nuestro mejores deseos.

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