La desgracia de ser un funcionario de Justicia









Como ya he comentado en otras tantas ocasiones los funcionarios de Justicia son de lo peor: entre todos mataron a Manolete, participaron activamente en el asesinato de Kennedy y por su ineficacia en la tramitación de expedientes provocaron la desaparición de los dinosaurios. Ahora las Naciones Unidas deberían intervenir porque me da que ellos también son los principales culpables del cambio climático. Sólo hay que ver las imágenes de cualquier dependencia judicial para comprobar que son nefastas y poco sostenibles para el medio ambiente: montañas de papel sin reciclar, espacios carentes de ventilación, millones ácaros en los rincones, ausencia de pantallas de TFT bajas en emisiones y radiaciones y encima estoy convencido que no siguen las más elementales normas en las revisiones de los conductos del aire acondicionado (entre otras cosas porque allí también se acumulan los expedientes).
Es muy probable que existan funcionarios de Justicia que antes de comenzar el curso le piden a sus hijos que no revelen a nadie en que trabaja su padre o madre, “mira Manolito si te preguntan en que trabaja mamá les dices que es funcionaria de Correos, bueno mejor no que lo de repartir cartas va fatal, pues entonces que está en el ayuntamiento, no, no, que pensarán que está enganchada al café, mira mejor le dices que es banquera, que los pobres están sufriendo mucho. Eso, banquera”.
Dos últimas reflexiones. Por un lado el exotismo que me produce la actividad del juez Garzón(recogida con la genialidad de siempre y un simple titular por Sevach),que lejos de trabajar en los casos que se le acumulan en su juzgado (sobre criminales que están vivitos y coleando o causas judiciales que requieren un poquito de atención), o de colocarse el disfraz de San Miguel para denunciar el sistema judicial prefiere irse por otros derroteros. Derroteros loables y que en algún momento tendrán que ser atendidos porque miles de personas se merecen una explicación o al menos saber dónde se encuentran sus seres queridos, pero me gustaría que las prioridades fuesen ahora mismo más actuales.
Por otra parte siento decirle a mis compañeros de Justicia, o a los de las Fuerzas de Seguridad del Estado, o a todos, que al final todo da igual. Que a la sociedad le molesta más que le suspendan la retransmisión de los partidos de fútbol o que les retiren el “Aquí hay tomate” antes que la renovación del sistema judicial, el sanitario o el que sea...y si no me creéis sólo tenéis que ver las multitudinarias manifestaciones y el estruendoso clamor popular.
Una penita.

1 comentarios:

Tito Paco dijo...

Hola querido amigo, ¿qué tal? Pasaba por aquí y como me ha gustado mucho su blog le escribo dándole ánimos y mi apoyo.

Reciba un coordial saludo de

Tito Paco.