Recibimos cada día a centenares de personas a las que "agraciamos" dándoles sus recibos para que paguen sus impuestos. Todavía no conozco a nadie que se alegre cuando le damos el papelito mágico, "la dolorosa", como le llamó alguno.
Evaristo llegó hace unos días a recoger sus dolorosas, las de este año, cuando siguiendo el procedimiento también apareció en la pantalla del ordenador chivato numerosos pagos pendientes de otros años. A diferencia de muchas otras personas Evaristo aguantó el tipo con suma entereza. Asumió sus deudas (en este blog recogeré en otra ocasión un listado de "excusas" para no pagar impuestos) con elegancia. Aparentaba ser un hombre reservado, culto, extremadamente educado y poco conversador. Le di casi 10.000 euros en recibos de impuestos pendientes. Cuando ya los había cogido sin rechistar y parecía estar a punto de marcharse comenzó a conversar conmigo:
- Chaval me has caido simpático y creo que eres una buena persona, por eso te voy a confiar un secreto. Seguramente te habrás dado cuenta que en los últimos años este planeta va mal. La gente es muy mal educada, están nerviosos y hacen poco el amor. Si te has preguntado por qué sucede esto la respuesta está en el cielo. Verás, un amigo trabaja en un observatorio de la NASA y me ha dicho que un gran meteorito se acerca a la Tierra, en la que impactará dentro de 8 meses. Es tan grande que lleva varios años alterando la órbita terrestre y por esta razón estamos los humanos haciendo cosas tan extrañas. Además, mi amigo me ha dicho que es un secreto y que los gobiernos no nos dirán nada hasta unos días antes.
Claro, imaginen un poco la situación. El señor tan serio contándome y confiándome su preciado secreto. Y yo sin saber muy bien qué decir. A priori sentí la becesidad de meterme bajo la mesa a descojonarme, pero claro, ¡cómo hacerle semejante deshonra a un apreciado contribuyente!. También estuve a punto de reclamarle los recibos que acaba de entregarle, ¿para qué iba a pagarlos si en ocho meses todos calvos?. Y también pensé en dejar de pagar la hipoteca...y ahora que caigo, ¿qué hago escribiendo este blog?