El retorno y encuentro con los sufridos contribuyentes


Haré caso omiso a quienes me han pedido que cuente cómo han ido mis vacaciones. A estas alturas lo único que me falta para que me declaren ciudadano non grato y me quemen el coche es que encima de ser funcionario les muestre que tengo vacaciones y que encima me lo paso bien. Todo a su debido tiempo. Tampoco puedo poner muchas fotos ya que en la mayoría salgo desnudo y la ONU obligaría a Google a cerrar el blog y Estados Unidos me mandaría a Guantánamo.
Para ganarme la simpatía de los ciudadanos les diré que mi viaje ha sido una incursión lúdica con el único propósito de conocer cómo viven los funcionarios de otros países. De Grecia os diré que lo están pasando francamente mal con lo del tabaco, una costumbre tan popular como nuestra paella. No terminan de asumirlo y un tufo de mala leche impregna los despachos. Y en Turquía se afanan por mejorar para entrar en la Unión Europea. En fin, que ahora me incorporo al trabajo y siento que tengo depresión postvacacional, quizá deba darme de baja e irme al balneario de La Toja.
A mi regreso me he encontrado con unos personajes la mar de simpáticos y que bien merecen una entrada. Veréis, dos días antes de que en mi oficina se emitan los recibos del temido IBI (o lo que es igual la famosa “contribución”), ya había colas para recoger las cartas de pago y volar al banco más cercano para pagarlos. Y por más que les decía a los vecinos ejemplares que no había prisa por pagarlos y que el plazo voluntario finaliza en octubre todos me respondían lo mismo: “el que paga descansa”, o “yo es que si no lo pago ya no duermo tranquilo”. Y esta actitud en los tiempos que corren me fascina.
Para ellos, y para todos vosotros mi pitufito de carne mechada matutino y un buen café...y una fotito del viaje. De Kéfalos, un lugar precioso.

2 comentarios:

Funcionario's blog dijo...

La verdad es que no entiendo como, viviendo en una isla, te vas a otra.

En fin, se ve que lo has pasado maravillosamente. Además, veo que el tiempo te ha acompañado.

¡Bienvenido, te echábamos de menos!

Marta dijo...

Uy pero si ya has vuelto!!!.