La comida navideña de los funcionarios, ¿se acerca el fin de una tradición?




Advertencia: la lectura de esta entrada puede herir gravemente la sensibilidad.


Sin rodeos: mi ayuntamiento paga anualmente una comida para que todos los funcionarios tengamos unos momentos de dulce armonía. Una larga tradición que podría remontarse al tiempo de los Reyes Católicos y que han mantenido y consentido sin excepción todos los partidos políticos, incluyendo a los socios temporales e imprescindibles de gobierno con ideologías de izquierdas (aunque también es cierto que estos mismos le dan palmaditas al "demócrata" Fidel cada vez que pueden).

Para delimitar vuestra imaginación debéis multiplicar unos 600 funcionarios por el menú que os plazca...y la cantidad superará los 20.000 euros que salen íntegramente de las arcas municipales.

La cosa es que este año y con la que está cayendo el alcaldé reunió a los sindicatos y les propuso eliminar "temporalmente" la comida para destinar la cantidad a alguna ONG local o a familias necesitadas. Se barajó incluso una alternativa híbrida como la de cobrar el cubierto con una cantidad simbólica para hacer lo mismo: repartir el dinero entre quienes peor lo están pasando. Por razones que no puedo confesar (recordad que en mi sueldo multimillonario hay una claúsula de confidencialidad) la propuesta no ha prosperado y ayer se consumó nuestro almuerzo.

La política entra en juego y todo se complica. Quienes en los últimos días han propagado rumores para boicotear la comida tachándola de escandalosa con la boca pequeña (para no cabrear a los funcionarios) apoyaron hace casi dos años un suculento aperitivo de canapes y vinos con la llegada de la nueva corporación municipal (eso sí sólo para los funcionarios que trabajaban en el edificio principal) con un desembolso de miles de euros.

Puede ser escandaloso que en todos estos años a ningún gestor municipal, a ningún partido de la oposición y a ningún sindicato se la haya ocurrido promover el fin de la tradición, pero también es cierto que entre los funcionarios no ha existido clamor popular alguno que respalde su final.

Ahora, os recuerdo una vez más la advertencia del inicio y os confieso que en una deliciosa y divertida velada brindé a vuestra salud. Lo siento.


Crean un seguro para políticos corruptos


Argentina, el precioso país que Pedro nos muestra en su blog, la patria de Maradona, los inventores del corralito, de los tópicos personajes locuaces capaces de vendernos a su madre o de la parejita presidencial Kirchner, cuyo dudoso patrimonio crece cada día, saca ahora la noticia de que una de sus principales aseguradoras pretende comercializar a partir del próximo año un seguro destinado a potenciales políticos corruptos.

Al parecer AON ofrecerá a los políticos electos un seguro por si en algún momento de sus vidas deciden "desviarse" del buen camino, incluyendo entre sus coberturas el enriquecimiento ilícito, la malversación de fondos públicos y la asociación ilícita entre otros. La aseguradora además de asumir los gastos de representación del personaje público en cuestión también se haría cargo de las indemnizaciones impuestas por los tribunales de justicia.

Desconozco si las mentes pensantes de AON están mal de la cabeza, o si pretenden obtener publicidad gratuita pero mucho me temo que este nuevo seguro tendrá sus días contados...¿o acaso lo veremos llegar también a nuestro país?

La vida te da sorpresas...

Ideas para odiar un poco menos a los funcionarios


Ya he tratado en este mismo foro y en multitud de ocasiones las simpatías que nos tienen gran parte de la sociedad. Y es que cuando sale la palabra "funcionario" para muchos la primera imagen que aparece en su cabeza es la de un nutrido grupo de trabajadores públicos tomando un café de seis horas, haciendo la compra en el supermercado en horario laboral, en una eternas y placenteras "bajaciones" o colocando más sellos que un portero de discoteca. Funcionario es sinónimo de sanguijuela chupóptera de la riqueza del país.

Ahora y sin que sirva de precedente (ya que la idea primigenia de este blog es la de tocarle las pelotas a todos los que nos odian) quiero que cuando la úlcera empiece a explotar al nombrar la palabra funcionario piensen en Alicia Gámez, esta compañera de Justicia secuestrada probablemente por Al Qaeda en Mauritania y que dedicaba sus vacaciones (o la hora del café y la compra en el súper) a ayudar a quienes más lo necesitan.

Y puestos a imaginar en compañeros idílicos nada mejor que hacer uso de los bomberos, que también son funcionarios. Ante la ira de un ciudadano (léase "administrado") yo he recurrido en ocasiones a una frase tipo "¿pero cuando usted me dice que todos los funcionarios somos unos vagos y chorizos también se está refiriendo a los bomberos o al personal sanitario o sólo a quienes trabajamos en este departamento?". Suele hacerse un silencio breve, pero silencio...lo justo para salir corriendo antes de que el simpático ciudadano lo interprete como una chulería e intente agredirte.

La cosa es que este cariño incondicional por determinado funcionarios (los buenos de la película) lo ha constatado el propio Centro de Investigaciones Científicas (CIS), que en su estudio "Riesgos y Catástrofes. Actitudes y conductas de la sociedad española" demuestra que el grado de confianza de los españoles en los bomberos supera al del resto de los funcionarios, con más de un 95% de aceptación.

En vista de los resultados a partir de ahora utilizaré más a los bomberos y la pobre Alicia Gámez para intentar corregir los efectos ulcerosos.

El EBEP fomenta el "buen rollito" entre los empleados públicos


Se llama Augusto T. Torras. Es un compañero que trabaja algunas plantas más abajo. Es un mal bicho y el mejor ejemplo es que lo esquivan cuando baja a tomar café. Se hace el guay, se considera el más guapo, más alto y más inteligente. Experto en cambiar de chaquetas dependiendo del alcalde que gobierne una de sus "mejores" cualidades es la de sonreirte o decirte "qué majo eres" cuando nada más darte la vuelta te pone de vuelta y media. En sus desvaríos llega a asegurar que tiene amigos en los servicios secretos de todos los países de Oriente Medio y que podría haber sido ministro. En fin, todo un personaje.
Fijaros bien en sus lindos ojos. Estaba condenado al ostracismo hasta que ha llegado el Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) a mi ayuntamiento. La razón es sorprendente y estoy convencido que quienes redactaron este documento nunca llegarían a imaginarlo. Veréis...vamos a partir de un escenario hipotético, de una supuesta leyenda urbana: antes, en algunos ayuntamientos (que no en el que trabajo porque se ciñe históricamente, incluso antes de la desaparición de los dinosaurios, a la más estricta legalidad)las plazas a funcionario se repartían: unas cuantas para los sindicatos (y así no protestan), alguna para la oposición, otra para mi amigo Manolito, sumo y me llevo dos...Los tribunales estaban formados por representantes municipales, sindicales y algún que otro inspector descarriado de la administración autonómica. Los repartos se podían distribuir(siempre hipotéticamente hablando)en los despachos o algún restaurante. Nadie más participaba.
Pero ahora la cosa cambia. Ni sindicatos y ni políticos podrán estar en los tribunales de oposiciones. Esto significa que serán los propios funcionarios (escogidos previamente con una exquisitez tan certera como los anteriores miembros del tribunal) quienes tengan poder decisorio y quienes, en un hipotético supuesto, puedan llegar a saber las preguntas con antelación, si la prueba llevará un supuesto práctico o si en la entrevista personal deciden acusarte de neurótico.
Y ahora volved a mirar a Augusto T. Torras...porque en mi ayuntamiento se ha corrido el rumor de que será miembro del próximo tribunal y por arte de magia, desde este mismo momento interinos y laborales se dan tortas por ir (y si hace falte invitarle) a desayunar con él.
La vida te da sorpresas...ojalá se torre.

Cómo comprar el silencio de un funcionario

El tiempo pasa volando y tengo más amigos de los que creía. Claro, conciso y relacionado: no escribo nada en esta tribuna desde el 29 de agosto, un hecho histórico en la corta historia de este humilde blog y esto ha provocado un aluvión de correos de admiradores inquietos. Eso sí, inquieto me he quedado tras darme cuenta que sólo tengo "admiradores", es decir que ni una sóla damisela se ha preocupado por mi salud. Hay verdades que matan.
Quienes me conocen saben que esta sequía de contenidos no es por falta de ganas sino por exceso de trabajo. Y esto para alguién que es funcionario puede parecer una auténtica contradicción. ¿Acaso hay funcionarios que trabajan? Pues parece que sí, que no es una leyenda urbana. Desde que estoy en la alcaldía, o sea desde que me trasladaron desde ese "dulce" paraíso de la recaudación municipal y me colocaron al ladito del alcalde y de doce concejales más, tengo un exceso de información y de emociones dignas de una película de Woody Allen. El problema es que tengo una cláusula de confidencialidad que me impide contaros toda la verdad y nada más que la verdad y por esta razón me gano un más que merecido sueldo de 5.068 euros netos mensuales. Una cantidad similar a la que cobran mis queridos Cuerpos Habilitados Nacionales en mi ayuntamiento.
Y si a esta cláusula le sumamos que hace meses perdí el anonimato de la autoría del blog pues entonces, y como podéis imaginar, voy de culo.
Me cuesta trabajo asumir tanto secretismo pero mientras pienso cómo trasladaros las situaciones tan absurdas de mi nuevo puesto os presento a José, mi nuevo héroe.
Gracias por vuestros correos.



Funcionarios a casa: adiós a la crisis, llega la gripe A


LLegó una señora a la alcaldía, primero estornudó y luego estuvo sonándose los mocos un rato. Otro hombre que estaba esperando en la sala se levantó y salió lentamente del despacho. La mujer nos miró y dijo apenada que tenía alergia desde hacía más de cincuenta años pero que por culpa de la gripe A cada vez que estornudaba la gente la miraba mal. Les respondí que no se preocupara, que yo era un experto en gripe A y que podía estornudar cuantas veces le diera la gana.

Debo reconocer que cada vez que veo algo sobre la dichosa gripe en los medios de comunicación es como si me golpera un huevo con una piedra. Viví en México, en primera línea, el inicio del brote de esta pandemia. Y jamás he visto un despropósito semejante y una gestión de la crisis tan nefasta. Pero lo peor de todo es que empiezo a ver que algo similar va a suceder en nuestro país. Tal fue el nivel de alarma creado que mis propios compañeros pretendieron que mi ayuntamiento impidiese mi incorporación al trabajo y me pusiera en cuarentena, algo a lo que se negaron con rotundidad la mutua y el servicio sanitario público (aunque a mi me encantaba la idea de tirarme cuarenta días rascándome los huevos por razones preventivas).

Como os decía lo que sucedió en México fue de juzgado de guardia. Para empezar, el anuncio de la gripe se censuró para que el prediente Obama mantuviese la visita prevista al país. Una vez abandonó México DF el gobierno se encargó de hundir la economía en la más absoluta de las miserias creando una alarma imaginaria sin precedentes. Unos meses después, y mientras la situación real se mantiene exactamente igual que entonces, no dejan de organizar conciertos solidarios donde miles de mexicanos pegaditos unos a otros no dejan de proclamar que allí ya no sucede nada. Unas semanas las estúpidas autoridades sanitarias mexicanas prohíbian el acceso a los monumentos al aire libre como Tulum para "evitar la propagación", aunque mantenían abiertas las atracciones turísticas privadas.

Aqui empiezan a verse señales parecidas. Ya hay quien nos recomienda evitar dar la mano, los dos besitos y cosas por el estilo. Curiosamente no dicen nada sobre concentrarse 20.000 personas en un estadio de fútbol, o sobre rozar los pasamanos del metro, o tocar los pomos de las puertas...pero todo llegará. Los fines de semana mueren más personas por accidente de tráfico que por culpa de la gripe y a nadie se le ocurre prohibir que circulemos por carretera.Al otro lado del oceano, en Nueva York, dese el primer día la autoridades sanitarias trataron la gripe A como una gripe común estacional. Hay más de 600.000 personas infectadas y ya van por 47 muertos pero nadie parece ver una excpecionalidad mediática al respecto. En España mueren cada año cerca de 8000 personas por la gripe pero la cifra parece olvidarse deliberadamente y la mecha del pánico arde con fuerza pese a que hay poco más de veinte fallecidos.

Pero insisto en destacar la diferencia: hay zonas de Estados Unidos donde el dengue sigue causando estragos (e incluso ya hay casos en Europa) pero no se empecinan en anunciarlo a los cuatro vientos. Lo mismo sucedió en sudamérica: mientras en México daban cifras falsas sobre las muertes por gripe (en aquellos días todos los que fallecían por cualquier motivo se lo anotaban a la gripe) otros países cercanos ocultaban (y siguen haciéndolo) sus cifras para beneficiarse de la huida en estampida de los turistas.

Temo que aqui sucedan todas estas cosas. Me aterra ver (como presencié en México) a las personas con mascarillas que no sirven para nada, que los turistas marchen a otros lugares o que finalmente un servidor y el resto de mis compañeros de la administración nos demos de baja al primer síntoma por simple "precaución" y exceso de celo.


¡Menudo invierno nos espera!

OEA: el ciruelo de J.


OEA (no confundir con la Organización de Estados Americanos), o lo que es igual el selecto y reducido grupo de funcionarios adscritos al grupo de Operaciones Especiales de Alcaldía. Somos diferentes y estamos preparados para cualquier contingencia. Desde preparar un café con restos de polvo de talco a montar el cirio padre alterando la agenda del mismísimo alcalde. Puede incluso darse la circunstancia de que el servicio de escolta se encuentre asegurando el perímetro a más de cinco kilómetros del primer edil mientras el susodicho se encuentra sólo y desamparado ante una terrorífica comunidad de propietaros cabreados con el ayuntamiento. Todo es posible.

Quienes trabajamos en la primera línea de fuego de la primera autoridad municipal sabemos de política internacional, informática, gestión tributaria, recetas con Thermomix (para darle coba a las mujeres de los concejales), artes marciales, fontanería, protocolo y toreo profesional.

Nada mejor que un ejemplo para expresar nuestra alta cualificación. Esta mañana coincidí con mi amigo J. Estaba muy preocupado y como miembro del OEA necesitaba mi ayuda. J. es funcionario y además de estar incluido en 38 bolsas diferentes participa en las pruebas de selección para la policía local. A J. le inquietaba que en el reconocimiento médico el facultativo en cuestión le hiciese bajar los calzoncillos y le palpase el ciruelillo al completo. A la salida de tan completo reconocimiento había consultado con otros aspirantes y al parecer a ninguno le habían escudriñado sus partes más íntimas. J. me reclamaba una investigación profunda al respecto y que además lo pusiera en conocimiento de la máxima autoridad municipal.

Lo peor de todo es que hasta donde han llegado mis investigaciones, al más puro estilo detective Colombo, parece que J. está en lo cierto. Toda la mañana ocupada buscando una explicación y al final no tengo claro si decírselo al alcalde o publicarlo en el blog para el conocimiento oportuno de la toda la comunidad científica internacional. Lo siento J.

¿Dejaremos de cobrar los funcionarios?


No es fácil abstraerse de lo que sucede a nuestro alrededor y por más que algunos gurús de la política se empeñen en que los funcionarios debemos gastar, a diestro y siniestro, para salvar la crisis lo cierto es que cada vez planea con más fuerza la posibilidad de que algún día, al parecer no muy lejano, hasta los funcionarios tengamos dificultad para cobrar las nóminas...o al menos algunos funcionarios.

Traigo a la palestra a Marc Vidal, a quien admiro profundamente. Es inteligente, brutalmente crítico y sin pelos en la lengua. Es, evidentemente, muchísimas cosas más pero esto ya lo podréis averiguar navegando sin limitaciones por su más que recomendable espacio web. La cosa es que Marc acaba de aventurar: "Apuesto a que antes de final de año las noticias empezarán a reflejar los primeros funcionarios exigiendo sus nóminas en las puertas de algunos ayuntamientos". Habrá quienes consideren esta afirmación como una auténtica barbaridad pero Marc no es de los que vaticinan alegremente malas noticias sin tener suficientes razones de peso. En la misma línea se pronunció hace tan sólo unos días un interesante artículo de La Vanguardia: "Los ayuntamientos vaticinan la quiebra en el 2010 si el Gobierno no toma medidas".

Entre los funcionarios de mi entorno es vox populi la crítica situación de algunos ayuntamientos andaluces, el anuncio inminente de quiebra y cierre de sociedades municipales y en la disminución drástica galopante de los ingresos en las arcas de las administraciones locales. Existe una tamizada inquietud y la curiosa sensación de que si esto llega a suceder siempre le pasará a los otros antes que a uno mismo.

Aparentemente en mi ayuntamiento la nómina está garantizada por una póliza de crédito pero desconozco la solidez presupuestaria de otros organismos próximos como la diputación o las mancomunidades más próximas.

El tiempo pasa y los análisis de Marc Vidal son meras conjeturas. La realidad, la de ahora mismo, la de este mismo instante es que pese a tener la mayor tasa de paro de Europa (con unas previsiones "optimistas" de incremento superiores al 20%) y unos datos económicos tan nefastos millones de españoles han salido a disfrutar las vacaciones. No pasa nada...aunque Marc Vidal pretende fastidiarnos el verano y jodernos definitivamente en otoño.

Las mentiras de alcaldía


Los incondicionales de este blog ya conocen un buen catálogo de mentiras recopilado durante mi paso por mi unidad de recaudación municipal. Mentiras que son habituales junto con las amenazas. La más común es la de "mire usted yo le juro que este recibo ya lo había pagado". Ahora estoy en alcaldía. Más glamour pero con un catálogo de situaciones dignas de una reality show.

En las semanas que llevo en la alcaldía me ha sorprendido hasta la perplejidad una mentira muy repetida: llega una señora, o señor, se planta en la sala de espera y se sienta. Le pregunto qué hace, y me responde que está esperando ver al alcalde. Miro la agenda en el ordenador. Le pregunto si tiene cita. Respuesta tajante y sin titubeos: "pues claro". Le pido nombre y vuelvo a comprobar en la agenda. Y nada, no aparece, "mire señor, pero no tiene cita con el alcalde y hoy no le podrá atender, si quiere le tomo nota y le llamamos". Y sin dudarlo: "es que me lo encontré por la calle y me dijo que subiera, que quería verme". En este mismo instante ya empiezan los conflictos porque si el señor alcalde le ha dicho a uno de sus vecinos que suba y sin cita...pues debe entrar sin dudarlo. Vale, pues entonces espere, el alcalde le atenderá en cuanto pueda.

Entro al despacho, "alcalde hay un vecino que viene a verle, que se cruzó el otro día con él y que le dijo que subiera". Cara de póker del alcalde (que además suele estar en tres reuniones simultáneas). Claro, no me lo dice pero por su cabeza asaltan las dudas, cada día se encuentra con mil personas y puede que en algún momento le dijese a alguién que podía subir a verle.

Finalmente el señor, o señora, entra a ver al alcalde. Y cuando sale del despacho la máxima autoridad municipal me llama..."mira, en mi vida he visto a este hombre y mucho menos le he dicho que quiero verlo. Al contrario ha venido porque quiere que le de un trabajo (a ser posible como funcionario, aunque esto será otra historia) a su hijo". Ea, ya me la han colado.

Lo curioso de esta mentira es que suele venir adornada con argumentos del tipo: "es que el alcalde es mi amigo del alma, somos como hermanos", "nos criamos juntos en el colegio y le enseñé a escribir", "mi madre le daba el pecho cuando la suya no podía", "estaba todos los días en casa jugando con mis hijos, que son como de su familia"...y nunca es verdad.

Os garantizo que el capote de torero que tenía en la unidad de recaudación no sirve para nada en la alcaldía...ante una panda de profesionales dignos de la Champions league.

"Lo bueno nunca acaba si hay algo que te lo recuerda"


Suelo llevar mal el verano. Calor, mis lugares preferidos atestados y mujeres con ropa ligera por doquier. Pero reconozco que el anuncio de la cerveza Estrella Dam me ha conquistado, especialmente en la versión larga que acompaña esta entrada, y encima lo ha rematado el recuerdo nostálgico de la canción de otro anuncio considerada como el himno de Australia: Waltzing Matilda.
No lo puedo evitar pero entre otras muchas cosas me siento íntimamente ligado al Mediterráneo y encima los de Dam me han recordado que el pasado año estuve navegando alrededor de Formentera. Las imágenes, los rincones, las calas, el barco e incluso la terracita a pie de playa me transportan a esta deliciosa escapada. Y es entonces cuando la frase que remata el anuncio cobra más sentido que nunca.
Lo mismo me sucede con Waltzing Matilda. Me duele que precisamente una compañía de telefonía móvil, tan éticamente incorrecta como todas, haga suyo este legendario himno que a mi me lleva a los años de la serie el Valle Secreto. Poco, por no decir nada, tiene que ver el sentido de la letra de esta canción con los jugosos intereses económicos que busca la marca roja de telefonía.
Al final ambas canciones me invitan a pensar que este será un verano diferente y que cada segundo que desperdiciamos es un momento perdido para siempre.
¡Camarero, una ronda para mis amigos!

Los perniciosos efectos secundarios de la gastronomía mallorquina


Licor de hierbas, sobrasada y ensaimada...todo mezclado produce unos gravísimos efectos secundarios, especialmente si se consume en grandes cantidades y por altos cargos de la administración. No encuentro otra explicación sensata a la actualidad que nos suele llegar de las Baleares. Ya os narré con detalle la historia de "amor" del funcionario de prisiones, que era de Mallorca; también son habituales las excentricidades administrativas que relata casi a diario mi amigo en el Funcionario´s Blog y ahora me entero que la consejera de Interior del gobierno mallorquín envió a un equipo de rescate en helicóptero para recoger a un funcionario.


Y me parece estupendo, otra cosa es que hubiese utilizado un helicóptero para ir de compras o llegar antes a la playa con la familia, pero ya me gustaría que mi alcalde me enviase el coche patrulla para ir a currar. Me da que el gabinete de comunicación de la consejera funciona regular, tirando a mal, porque la noticia podría tener otros enfoques más "políticamente correctos": ejercicio especial de salvamento, curso de reciclaje, motivación del personal, verificación del cumplimiento de la jornada laboralde o gratificación extraordinaria a funcionarios en activo...


Puestos a imaginar me cuesta trabajo pensar en el careto del funcionario cuando se acercó el helicóptero con el equipo de rescate a recogerlo. Y ya que escribo sobre excentricidades y los efectos que la exquisita gastronomía mallorquina provoca en los empleados públicos propongo participar en el debate del Funcionario´s Blog sobre su peculiar uniforme de trabajo: pasen y vean...

Sólo para adultos. Dudas sexuales de un funcionario


Estaba claro, hoy día de reflexión tenía pensado escribir sobre mis últimos días de vacaciones en Cerdeña, sobre mi cambio de puesto de trabajo, del viaje de mi compañero Pepe a "frikiJapón", mi nueva experiencia como "representante de la administración" en las elecciones de mañana o del jefe tóxico de mi amiga C. que le está haciendo la vida imposible. Pero a veces la actualidad me lo pone a huevo (y esta palabra viene que ni pintada)...cambio de tercio (o sea que esto nada tiene que ver con los funcionarios, todavía está a tiempo de salir de este blog. El que avisa no es traidor) y como buena jornada de reflexión prefiero lanzar al aire una duda existencial que me corroe por dentro desde esta mañana.

Muere David Carradine, el escuálido actor del pequeño saltamontes. Vale, bien, todos debemos morir, pero El Mundo titula hoy que su muerte se debió por un "accidente sexual" y cita fuentes de la investigación. Pero lo que me trae de cabeza es la técnica que el Sr. Carradine estaba utilizando para darse gustito en el momento de la muerte: "desnudo con una cuerda atada al cuello, otra a los genitales y ambas al armario".

Dos reflexiones al respecto: por más que lo intento imaginar y miro el armario no logro encontrarle el puntito gracioso. Y otra cosita, al funcionario Worapong Siewpreecha, general de la policía de Bangkok, alguién debería darle algunas clases sobre privacidad, derecho a la intimidad o sensatez y cordura en sus declaraciones a la prensa...o enviarlo directamente a controlar el tráfico...con una cuerdecita que le sujete el pito por supuesto.

Aprendiendo expresiones para pedir una subvención


Dos años despúes de poner mi trasero en una mesa de atención al público ya soy capaz de ofrecer algunos resultados asombrosos de esta fascinante experiencia. Tras los embargos llega el periodo voluntario del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), lo que el 99% de los ciudadanos conoce como "Impuesto de Circulación"...aunque no lo sea. Lo habitual es que el sufrido vecino pida el "sello" del coche, pero en ocasiones te sorprenden con cosas como la "viñeta" o el "boleto". Lo último ha sido el "boleto del automotor"...era cubano. Los extranjeros suelen ser más básicos, unos te reclaman el "road tax", otros el "car tax" y la mayoría se comunican con los paletos españoles con sonidos guturales mientras tiran sobre la mesa el recibo del año anterior...de estos personajes ya escribí en otras ocasiones porque suelen ser la flor y nata de los hijos de la Gran Bretaña.
Otro aspecto interesante de mi observación social es que no pasa ni un día en el no que reciba una llamada de teléfono, de un asustado contribuyente, estresado y agobiado, "porque he visto en la televisión que el último día de pago es hoy"...y lo cierto es que nunca es verdad. Llevo recibiendo este tipo de llamadas varios días y el fin del periodo no termina hasta el 31 de julio. ¿De dónde carajo sacan esta idea, que tele ven?.
Todo esto me ha llevado a pensar seriamente dos cosas que podrían cambiar mi vida. Por un lado la posibilidad de pedir alguna subvención, mejor si es europea, que financie mis sesudas investigaciones. ¿Por qué no?. Hace unos años en Sevilla aceptaron una subvención millonaria para que durante varios meses un grupo de agraciados degustasen diferentes variedades de jamón ibérico. Mis obsevaciones podrían suponer importantes cambios en la política de integración de la Unión Europea. Y por otra parte también he pensado que puedo plasmar sobre papel todo lo que observo y presentar mis conclusiones a los IgNobel, o lo que es igual: al catálogo de gilipolleces y cosas estúpidas sobre las que destinan recursos e ingentes cantidades de dinero la comunidad científica internacional. Os lo aseguro, más divertido que el "boleto del automotor" es la lectura íntegra de los agraciados en 2008.

Dudosas estrategias políticas: o cómo poner en riesgo el sistema

No es sobre el debate del estado de la nación. Esta es una historia más próxima. No importa quiénes son sus protagonistas, sus colores o sus tendencias porque la "brillante" idea que os voy a contar se le podría haber ocurrido a cualquier aprendiz de mago de la política.
Unos breves antecedentes, en mi ayuntamiento hay programado un cambio de gobierno radical para dentro de unos días. La oposición ha presentado una moción de censura que si todo sigue como hasta ahora será efectiva el próximo día 18 de mayo.
Y en nuestro departamento, recaudación municipal, nos hemos enterado a través de los medios de comunicación de la penúltima genialidad de quienes a día de hoy todavía nos gobiernan: cuando apenas faltan unas semanas para que de comienzo el periodo de pago voluntario del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles), una de nuestras principales fuente de ingresos, han anunciado mediante decretazo que todos los empadronados sin deudas con la administración local tendrán un descuento del 55%. Pagarán un 60% menos quienes lo tengan domiciliado.
El conjuro ha sentado de maravilla a mis queridos vecinos, que esta mañana ya hacían cola para redimir sus deudas pero esta medida crea una grave situación.
A priori hay quienes han puesto el grito en el cielo, incluyendo algún sindicato, porque peligra seriamente el pago de las nóminas a los funcionarios. Esto, que a los funcionarios nos pone los pelos de punta, a la mayor parte de los mortales le divierte ya que nos consideran unos enchufados privilegiados.Las arcas municipales atraviesan por una delicada situación y prácticamente los presupuestos y los préstamos solicitados en los últimos años se han sustentado sobre unos ingresos futuros de IBI que ahora se reducen a más de la mitad (esto es magia y no lo que hace Harry Potter).
Pero el encantado ciudadano parece ser que no tiene en cuenta que los servicios públicos más elementales, los proyectos de infraestructuras y en definitiva su calidad de vida gira en torno a cómo vayan nutriéndose la administración local.
A cortísimo espacio la estrategia del partido saliente (que ha recibido la moción de censura con un cuestionable talante) parece redonda e incluso magistral ya que si el nuevo gobierno decide eliminar esta medida se le pondrá en contra toda la ciudadanía y tendrá muchas papeletas para perder las elecciones dentro de dos años.
Yo he propuesto que el nuevo alcalde ofrezca directamente la exención del impuesto a todos los vecinos y que además les ofrezcamos un cheque-regalo de El Corte Inglés de 100 euros. ¿Quién da más?
Aunque a pesar de todo el protagonista del vídeo lo tiene peor...

Memorias de un funcionario en México


He estado en México los últimos días. Soy un valiente o un insensato. Pero la cosa es que estoy con un moreno tropical, una sonrisa de orea a oreja, unos kilos de más por el pernicioso todo incluido, una cámara de fotos plagadas de buenos recuerdos, un descomunal cabreo con el gobierno bananero de México y una profunda tristeza por los amables y simpáticos ciudadanos de este bello país.
No explicaré los motivos que me llevaron inesperadamente a este lugar del caribe porque los no habituales de este blog me odiarían aún más. Dejaré para otro comentario la experiencia con los funcionarios policías de este lugar y me centro ahora en mi incorporación traumática postvacacional a mi puesto de trabajo.La cosa es que mientras estaba plácidamente en Playa del Carmen tomando el sol con un daiquiri de mango en la mano mis compañeros asistían alarmados a la última estupidez mundial: la pandemia de gripe A, o lo que es igual el despropósito del gobierno mexicano para acojonar al mundo. Y paralelamente el pánico llegó a mi trabajo...

El mismo día que regresaba de México un compañero me remitió un mail con los correos que habían ido circulando entre mi jefe, el departamento de prevención de riesgos laborales y los médicos de la mutua de accidentes que presta servicios en mi ayuntamiento. Básicamente las comunicaciones ponían de manifiesto mi potencial riesgo para la salud mundial y por ende para todos mis compañeros. En uno de los correos se solicitaba el "protocolo de actuación para un trabajador que está de vacaciones en la Riviera Maya". Y afortunadamente la mutua se limitó a enviar los consejos del ministerio de Sanidad y a certificar que podía permanecer en mi puesto de trabajo mientras no tuviese síntomas.

Tan acojonados estaban mis compañeros ante mi regreso que decidí pasarme por mi médico de cabecera a reclamar una baja preventiva. Pero se descojonció. No tuve más remedio que ir a trabajar.

De mi entrada en las dependencias municipales llegué rápidamente a la conclusión de que o las mujeres son más responsables, más miedosas o huelo muy mal ya que ninguna quiso acercarse a mi. Los compañeros masculinos, los machotes de toda la vida, no tuvieron el más mínimo problema. Todo normal. Y algunos, en un ataque de pánico digno de estudio, decidieron solicitar el traslado a otras dependencias mientras pasa el periodo de incubación establecido en 10 días (y que termina el próximo jueves).

Y mientras pasan estos días yo sigo con mi rutina habitual, atendiendo a los ciudadanos y amargándoles la vida dándoles recibos y quien sabe si una simpática gripe...un auténtico servicio público integral.

Cuidadín, cuidadín.

"Fíate de la Justicia y se te caerá el cielo encima"




El blog del genial Sevach es una fuente inagotable de sabiduría, experiencia, puntos de vista insólitos y enlaces a páginas fascinantes (chapó por la de Samuel Parra, dedicada a la Protección de Datos, que últimamente me traen de cabeza). Me ha costado varios días digerir una de sus entradas y posicionarme al respecto.


No tiene desperdicio el desarrollo completo de la aventura emprendida por un abogado para recuperar su teléfono móvil robado (léase para los exquisitos al derecho: hurto o desaparición...sin violencia). Os suplico encarecidamente su lectura en la web Al Derecho, cuyo subtítulo es el que encabeza esta entrada: "Fiat iustitia etsi ruat caelum". El protagonista en cuestión despliega todos sus conocimientos sobre el sistema judicial y también sus amistades para alcanzar su objetivo.


Reconozco que al margen de la espectacularidad del asunto y del magistral relato de los hechos la primera sensación que tuve tras su lectura no fue nada buena. Prepotente y excéntrico, esto es lo que me pareció. Pero luego recordé las enseñanzas de Yoda en la Guerra de las Galaxias y de aquella frase "tu enfoque determina tu realidad" (extraida del catálogo de frases absurdas de Yoda en la Wikiquote), me zampé con mis compañeros un arroz caldoso junto al mar y reflexioné sobre el asunto. Y enconces he cambiado mi enfoque: creo que lo que realmente siento es envidia por la inteligencia y determinación empleada por el valiente abogado.


Cierto es que a cualquier mortal le habría supuesto un desembolso económico importante (y desde luego superior al coste del terminal telefónico) la puesta en marcha de toda la artillería legal. También habrá quien considere que los juzgados y el trabajo de la Brigada de Investigación Tecnológica están para cosas más importantes que para resarcir la curiosidad de los abogados o constatar la veracidad de sus experimientos. Pero no, todo esto lo pude pensar al principio...ahora lo cierto es que la envidia me corroe.


Envidia porque me encantaría hacer lo mismo que este abogado para demostrar de una vez por todas que en mi particular batalla contra Orange no sólo la empresa me está toreando sino que las Administraciones que deberían defenderme han tratado mi reclamación como un churro más dentro de las millones de quejas que se tramitan cada año. Esto es extrapolable a multitud de cosas que nos suceden en nuestra vida diaria. Por ejemplo hace muchos meses unos ladrones intentaron entrar en casa descolgándose con cuerdas desde la azotea y causando destrozos. Dejaron huellas por doquier y tras presentar la denuncia todavía estoy esperando que vengan "los de la científica" tal y como me dijeron que harían en la comisaría. Ni pueñetero caso. Y hace unos días también tuve un problema con Bancaja que jamás tendrá solución.


Lo cierto es que si todos usásemos las mismas armas que este testarudo abogado para hacer valer nuestros derechos la vida nos podría ir mejor...¿o no?


Nota: en la foto superior el abogado viene a casa a ayudarme en mis problemas. En la inferior Yoda.

De limonadas, perdones, importancias y gambas


Vamos, que esta entrada es un auténtico gazpacho.
Limonadas porque Rosa Cobos desde su interesante blog ha tenido la deferencia de recomendarme. Nada más tener conocimiento de este galardón dije lo de siempre: "que no me lo merezco, que yo sólo pretendo entretener, que hay quien lo merece más que yo, que los funcionarios no podemos recibir premios, que se lo dedico a quienes sufren en silencio (de hemorroides por ejemplo), que lo voy a donar a una ONG, que se lo dedico a mi madre y bla, bla, bla". Pero no, en esta ocasión llamé a la Agencia Tributaria y pregunté si tenía derecho a alguna deducción en mi próxima declaración de la renta. Una vez retenido el IRPF del premio me escapé de viaje a la España profunda. Gracias Rosa, lo cierto es que el resto de los blogs que has recomendado (y otorgado una fresquita limonada) son mucho más interesantes.
Perdones porque no puedo resistir la tentación de reproducir textualmente la carta que ha salido publicada en el Periódico de Extremadura firmada por Daniel García:
"Pido disculpas por ser funcionario. Pido disculpas por haber estudiado una licenciatura y haber estado durante más de dos años (y aún sigo) con poca vida social, trabajando, y estudiando más de cinco horas diarias para aprobar dos oposiciones. Pido perdón porque este año nos han subido el sueldo un 2%, estando la inflación unas décimas por debajo. Pido perdón también porque esta misma cláusula se aplicó la última década, cuando el IPC era de más del 5%. Pido disculpas a la gente que durante los últimos años ganaban más del doble que yo sin tener la educación básica y me restregaban su flamante BMW nuevo. Pido perdón a todos los políticos, altos cargos, banqueros, empresarios y periodistas que abogan por la congelación del sueldo de los funcionarios para no hundir las arcas del Estado. Pido perdón por haber sido una hormiga y haberme ganado a pulso, en un procedimiento libre y abierto, mi puesto de trabajo."
Importancias porque me emocioné al leer el artículo de Ignacio Arias en La Nueva España, "La inmovilidad de los funcionarios", aunque dudo mucho que los cenutrios enemigos de los funcionarios lleguen a entender algo de lo que escribe.
¿Y las gambas del título? pues las gambas sustituyen a la limonada (que me disculpe Rosa) y van por todos vosotros...¡salud!

La paradoja del funcionario


En este mismo espacio he recogido multitud de situaciones y ejemplos donde la falta de respeto se convierte en demasiadas ocasiones en el día a día de los funcionarios. Muchas personas nos odian y la envidía tan española se ceba con frecuencia en los tópicos de siempre: somos vagos, cobramos demasiado, sólo sabemos tomar café, parasitamos y deberíamos estar todos en la calle (dejando eso sí nuestro puestos a otros más "capacitados"). Como ya conté en otras ocasiones los funcionarios tenemos la culpa de la desaparición de los dinosaurios, del asesinato de JFK, de la muerte de Manolete, del cambio climático y en las últimas semanas de la crisis. Tenemos tanto tiempo libre y nos aburrimos de tal modo que dedicamos casi todas nuestras energías a hundir el planeta, generar crisis humanitarias y organizar guerras. Somos la caña.

A pesar de ser criaturas tan deleznables me sorprende que en las últimas encuestas realizadas a universitarios figure como trabajo preferido la función pública. Y mientras descienden las convocatorias de oposiciones debido a la crisis y la "contención del gasto" paralelamente aumenta exponencialmente el número de candidatos a estas pruebas. En Castellón se han presentado más de un 23% de aspirantes respecto a convocatorias anteriores y en Galicia más de 13000 personas optarán por 136 plazas. La Junta de Andalucía acaba de sacar 6000 plazas de profesores y si aplicamos la proporción plaza/aspirante el resultado será impresionante.

Caen empresas y sube el paro...pero las academias hacen su agosto. Nunca habían estado tan llenas como hasta ahora. Y esto implica un incremento en las ventas de material de oposiciones, en las descargas de tutoriales y en la contratación de profesores de apoyo. Incluso a través de este blog he recibido en las últimas semanas varias propuestas para meter algún baner publicitario de empresas dedicadas a las oposiciones o libros de texto.

Me temo que tanto aspirante para tan poca plaza sólo servirá para crear más frustraciones y llenar aún más el saco de los enemigos de los funcionarios.
Nota: en la foto os muestro en exclusiva a "Pancho" cuando se preparaba unas oposiciones antes de que le tocara La Primitiva

El fascinante mundo de los cursos de formación para funcionarios


Si he tardado en actualizar este blog ha sido porque me he tirado una semana de celebración salvaje. Jamás imaginé que en algún momento de mi vida pudiese corresponderme un maravilloso curso de formación. Al recibir la documentación entré en un estado catatónico y decidí organizar una fiesta por todo lo alto. Dicen, los que entienden de estas cosas, los funcionarios que acumulan más de una decena de trienios, que esto sólo pasa una vez en la vida...
Como ya escribí en alguna ocasión aunque al resto de los mortales les parezca una extravagancia a muchos funcionarios nos da por hacer cursos e interesarnos por nuestra formación. Curioso comportamiento teniendo en cuenta que nuestro trabajo es para toda la vida y que muchos consideran que estamos todo el día rascándonos los huevos.
Pero esto es un mundo. Por un lado están las grandes cifras que anualmente dan (especialmente los sindicatos) sobre los miles de millones de cursos que se ofertan...tocándome la moral porque jamás conseguí ninguno. Aunque la realidad, por más que intenten maquillarla (hace unos días vi en un folleto una cifra escandalosamente alta y luego me percaté que los "cientos de miles" de funcionarios beneficiados por la formación se referían a la cifra total acumulada desde que comenzaron años atrás los cursos) es muy diferente, o lo que es igual, hay que ser una persona tocada por la suerte como yo (o quizá tener un enchufe de tres clavijas) o llevar quince años reclamando uno para que te toque.
Y aunque cuando lo solicité especifiqué claramente que mi preferencia iba por el curso de "nuevas técnicas de restauración: respostería y panadería", finalmente me han asignado el "curso de disfraces y técnicas de camuflaje para evitar la agresión del ciudadano en tiempos de embargos"...para la próxima reencarnación será.
Buen fin se semana!!

Recursos para funcionarios: las verdaderas utilidades de las nuevas tecnologías aplicadas a nuestro trabajo


Al parecer 300.000 autónomos están al borde del precipicio. Lo dice el presidente de su federación, que también ha denunciado que de los miles de millones de euros anunciados por el gobierno en ayudas a través del ICO tan sólo el 0,03 % ha podido llegar a quienes lo necesitan. ¿Qué es lo que ha pasado? Pues el gobierno ha recurrido a la respuesta más utilizada cuando no hay una buena explicación y que sin embargo todos aceptamos sin rechistar: "ha sido un desajuste infomático" o "fallos en la aplicación informática".
Y esta es la verdadera esencia y utilidad de la nuevas tecnologías aplicadas a nuestro día a día. Entiendo que esta afirmación puede llegar a irritar a los amigos que defienden y promueven conceptos como la Web 2.0, la modernización de los servicios públicos y el concepto tan lindo como la administración electrónica. Pero lo cierto es que salvo algunas excepciones la tecnología es una herramienta útil para dar excusas convincentes.
No hay día en el que no recurra a "fallos en la red, en el servidor, en la transferencia de datos, en el volcado de información, en el sincronismo con los bancos,...". Y muchas veces me han dado ganas de inventarme algo más exótico para comprobar el nivel de conocimiento de algunos listillos, algo así como "fallos estructurales en el sistema nanosódico de la subred de pantalla RJ5"...vamos una cosa grave que te cagas. Porque lo curioso de todo esto es que mientras muchos enteradillos son capaces de discutir contigo la Ley General Tributaria como si la hubiesen redactado ellos mismos o inventarse nuevas leyes a la hora de los problemas informáticos nadie rechista y lo dan como la cosa más normal del mundo.
Tomad nota...os sacará de un buen apuro...hasta al Gobierno le sirve.

Despistes y despistes. En qué se parece Bermejo al resto de los mortales.


Es difícil describir lo que sentí cuando hace unas horas escuché al ministro Bermejo dando sus explicaciones sobre la polémica cacería. Y es que todos los días atiendo a vecinos, ciudadanos, contribuyentes que me repiten hasta la saciedad "es que me he despistado".

Una escena habitual: "mira, es que me han embargado la cuenta y yo no debo nada, seguro que ha sido un error" (esta es la primera excusa más utilizada y ponen la misma cara que el de la foto). Saco un listado de deudas e informo. "pues yo juro por mi madre que esto ya lo había pagado" (segunda excusa más empleada). Insisto en que el sistema informático me jura por Bill Gates que nunca se ha pagado y cuando ya no existe escapatoria, "pues me he despistado" (ya llegó la tercera dispensa).

Lo peor de todo es que hay dos personajes que rizan el rizo (la mayoría ante la imposibilidad de escapatoría suelen poner cara de cabreo y asumen su "despiste" y cabezonería): los que consideran que en el ayuntamienrto somos una panda de bandoleros y se van convencidos (e includo te lo dicen sin reparos) de que por arte de magia hemos duplicado su recibo y los que en una retórica digna de la familia Simpson pretenden que le demos al "botoncito" correspondiente para eliminar el embargo y los recargos porque según su sabiduría legal "cuando uno se despista no significa que no lo quiera pagar y la ley lo contempla". Y se quedan tan anchos.

Bermejo se despista, como mis queridos contribuyentes, pero es que hablé con un funcionario de la policía local y me cuenta que los que se saltan los semáforos en rojo casi siempre dicen lo mismo, "es que me he despistado, te juro por Snoopy que es la primera vez que me pasa"; y los que van a 186 kilómetros por hora en una travesía donde la velocidad máxima son 50 km/h, "es que me he despistado, con estos coches tan modernos es que ni te enteras". Sobran los ejemplos.

Así pues, si a mis vecinos no les ampara la Ley del Despiste Universal para quitarles los embargos y si al ingeniero de la NASA que se "despistó" y no se fijó en las grietas que destruyeron al transbordador espacial lo enviaron a coger mejillones al desierto del Gobi...digo yo que a Bermejo le pasará algo...¿o no?

Los funcionarios más maltratados


Bajo este título muchos pueden darse por aludidos (escribid vuestros comentarios) pero no he podido evitar las risas leyendo una información publicada en ADN-Aragón sobre las posibles medidas que adoptará el gobierno de esta comunidad para evitar las agresiones a los funcionarios.

Y es que puedo comprender que entre lo más perjudicados se encuentren casi siempre los agentes del orden, o los profesores, o los médicos de urgencias, o los basureros....no se, puestos a pensar en el riesgo podemos llegar a meter en el mismo saco a los compañeros de los registros, de los departamentos de mercadillos, o los que como yo estamos en las unidades de recaudación haciendo cosas tan perversas y maquiavélicas como embargar cuentas y nóminas. Todo unos cabronazos.

Sin embargo leo el periódico gratuito y descubro que entre los funcionarios que más agresiones sufren en Aragón se encuentran, " los trabajadores de las instalaciones deportivas, los centros cívicos, el cementerio y el albergue son los que corren más peligro de sufrir la ira de ciudadanos descontentos" . ¿los de las instalaciones deportivas? ¿por qué? y ¿los de cementerios? ¿qué carajo hacen estos funcionarios para cabrear al personal? No logro imaginar nada...

Qué hacer para no jubilarse anticipadamente. Tipos de funcionarios y funcionarios.


Reconozco que soy muy despistado y que de determinadas cosas no me entero de nada. Advierto que hago la siguiente reflexión de forma superficial y sin entrar en demasiados detalles, ya habrá tiempo en los comentarios y en los correos ofensivos para que me cubran de gloria.
Como la vida misma también dentro de la administración existen clases, clases y más clases. En algún momento entendí (pero me da que lo hice mal) que los funcionarios de carrera como yo nos encontrábamos en una situación agradable/generosa/cómoda dentro de la pirámide funcionarial. A ver, hacia abajo los interinos, laborales y funcionarios de "empleo" (= posibles enchufados). Luego los funcionarios de carrera y por encima los dioses del paraíso: léase cuerpos habilitados nacionales y otras criaturas de las que escribiré en otra ocasión.
Pues bien, mi compañera funcionaria laboral ya está disfrutando una merecida jubilación parcial de lujo, jubilación de la que no puedo disfrutar yo porque me quedan 30 años para que me las merezca y encima soy un simple funcionario de carrera. Pero esto no parece nada lógico. A mi este modelo de jubilación me fascina: dedicas un mes de trabajo y el resto del año a vivir la vida loca...como el de la foto. No pierdes poder adquisitivo y sigues cobrando como si trabajases todo el año. Encima puedes acceder a todas las ayudas sociales recogidas en el convenio colectivo y cuando acudes a trabajar debes descontarte los días que te corresponderían de asuntos particulares y vacaciones. O sea que ni siquiera llegas a trabajar un mes.
Pero eso, un laboral puede...un funcionario de carrera no.
Algún sindicato, como CCOO lleva varios años intentado corregir esta injusticia pero si en tiempos de bonanza económica nadie hizo nada ahora mucho menos. Y también se supone que el simpático Estatuto Básico del Empleado Público servirá de algo...pero esto se supone porque a la hora de la verdad tan sólo sirve para poner los dientes largos.
La envidia me corroe...

La culpa de la crisis la tenemos los funcionarios...con Aznar esto no habría pasado


Sábado, 31 de enero, El Mundo nos deleita con una gran portada "España tiene por primera vez tres millones de funcionarios". La versión colgada en su portal digital difiere de la versión impresa, que es mucho más explícita con las intenciones de la noticia. Este periódico, con esta información, pretende hacer una carambola: criticar al presidente del gobierno por permitir un aumento en el número de los funcionarios pese a la crisis, putear a ZP por consentir el incremento salarial de los funcionarios por encima del IPC y, de camino, sugerir que con Aznar nada de estos desmanes hubiesen pasado. Insisto, la información gratuita de la web es más aséptica que la versión de pago en papel.

Creo que cada uno de los funcionarios (o no funcionarios) que leen este blog pueden tener varias razones para rechazar en pleno el enfoque tendencioso de la información. A mi a priori se me ocurren tres:

1.- Curiosamente el periodista obvia las miles de plazas que han sido suspendidas debido a la crisis económica.

2.- No ofrece datos comparativos sobre el ratio de funcionarios/habitante en países que no están en crisis.

3.- Tampoco recoge algunas de las propuestas promovidas por algunos sectores sociales que plantean la posibilidad de haber invertido el dinero destinado a la salvación de los bancos en aumentar la contratación pública, como empleo de calidad que mejore la calidad de vida de miles de familias.

En la versión papel, en página impar el periódico incluye una pieza en la que destaca como Aznar no permitió el aumento salarial de los funcionarios mientras fue presidente del gobierno. Y puestos a proponer estupideces aconsejo a quien corresponda que estudie la viabilidad de la venta de algo tan personal como la virginidad para salir de la crisis: esto sí que es una medida original.

Hoy la viñeta que acompaña esta entrada va dedicada con especial cariño a este simpático periódico.

Si es que nos quejamos de vicio


Sobran los ejemplos y los casos pero al leer la información del Levante-EMV ("Colapso y caos en los juzgados de Nules") he pensado inmediatamente en las aventuras que con regularidad nos cuenta el amigo "Funcionata (Vivencias en la Administración)", cuya presentación del blog no puede ser más expresiva:
"Un lisérgico viaje por los entresijos y vericuetos del cosmos administrativo, donde lo cotidiano se mezcla con el surrealismo, el frikismo y lo absurdo."

Pues eso, que he visto la foto y me recordó a todos sus capítulos, con cajas, extintores, rollos de papel higiénico y ratas. Vamos que se queja por puro vicio. Y lo mismo le sucede a estos compañeros de los juzgados de Nules (Castellón), donde se acumulan los expedientes por los suelos, cajas hasta el techo, ordenadores, rotos, pruebas del tiempo de los dinosaurios, huesos humanos en las estanterías, larvas que se comen la ropa, la comunidad de ácaros más grande de Europa y cuatro pobres guardias civiles sentados sobre los archivadores del caso Kennedy porque las sillas hace tiempo que desaparecieron abducidas o digeridas por una de las larvas...o de los dinosaurios.

Y pienso: si los políticos organizan jornadas de puertas abiertas, ¿por qué no organizan los compañeros de Nules lo mismo y convierten los juzgados en una nueva atracción turística?

El gabacho listillo


En la nueva quincena del embargo he "disfrutado" con la privilegiada visita de un gabacho la mar de listillo. Llegó indignado. ¿Cómo se nos ocurre hacerle la vida imposible a un franchute?. Pues eso, llegó cabreado. Había recibido una carta certificada en la que el ayuntamiento le reclamaba en vía ejecutiva, o sea con sus correspondientes recargos, el pago de un impuesto que la criatura no había pagado cuando le correspondía en el mes de junio del pasado año.

Y allí estaba, con su gran porte y su chulería. Jurando por la gloria de su madre y de la revolución francesa que él había pagado el recibo, y más concretamente en el mes de mayo. Carajo, se acordaba con precisión. Lo comprobé varias veces en el sistema. Nada, no aparecía pagado por ningún sitio.

Entonces le ofrecí una solución: si me traía el recibo del 2008 sellado por el banco, o sea el sellito ese de "pagado en caja", le anularíamos el recibo. Nunca ha sucedido, pagar un recibo en un banco y que el sistema no lo reconozca...pero cosas peores he visto. Entoces su cara cambió de expresión. Sacó un maletín y se puso a buscar en su interior... y me plantó el papelito en mis narices.

Era, efectivamente la carta de pago de 2008. La miré por arriba, por abajo y de perfil. Y no encontré nada...y antes de decírselo me señaló inquisitivamente con el dedo, como si me dijese algo así como; "mira chaval, so imbécil, ¿es que no ves que está aquí?". El franchute me señalaba un sello, sí un sello, concretamente el matasellos de Correos que plantamos en nuestro propio departamento y que pone "Franqueo Pagado". Y se quedó tan pancho.

Para el francés este sello demostraba que lo había pagado. Y por más que le explicaba que eso era un matasellos y que no tenía nada que ver con lo que debía traerme, ni con el pago del recibo, pues nada de nada. Le entraba por un oido y le salía por otro. Pero la cosa no terminó en este diálogo para besugos. Se levantó cabreado, muy cabreado y me dijo que vale, que perfecto, que le diera una nueva carta de pago, que prefería pagarlo de nuevo a seguir discutiendo conmigo. Ea, y se quedó tan contento.

Vergüenza ajena


Sucedió el viernes pero no es algo aislado. Con un poco de observación y mirada crítica lo podréis ver en otras ocasiones.

Me levanto con la información de Médicos Sin Fronteras. Cuando toda la atención informativa internacional pasa por el conflicto israelí/palestino esta ONG recuerda una vez más las tragedias que día a día se olvidan en los medios de comunicación. Y son muchas. Sonrío. Pienso, mientras me meto café en vena antes de ir a trabajar, que en este día los informativos dedicarán unos segundos a barbaries que pululan en este nuestro planeta sin que nadie le haga ni puñetero caso.

No me gusta que Israel ataque a Gaza. Tampoco me gusta que el grupo terrorista Hamás ponga bombas en las calles de Israel o lance misiles por doquier apoyados por Irán. Y mucho menos me gusta que la atención mundial se centre una y otra vez en lo mismo de siempre.

Pero lo peor estaba por llegar.

A primera hora de la tarde casi todas las cadenas nacionales del país, incluyendo la pública, cortaron su emisión para ofrecer en riguroso directo la rueda de prensa del presidente de un club de fútbol. A última hora del día los conflictos del planeta, la penuria de millones de personas era una mota testimonial en las parrillas de los informativos...y sentí vergüenza ajena. Una vez más me quedó claro lo que de verdad nos importa.
Foto: de MSF, es de unos refugiados haciendo cola bajo una tormenta de arena para recibir algo de comida.

Cómo insultar a un funcionario sin violar la Ley


Al perlita de mi primera entrada del año, al amigo de los funcionarios Joan Martínez Vergel, se le suman ahora el enfoque que algunos medios dan a determinadas noticias. Leo con perplejidad el titular de La Sexta: "Ya puedes insultar a los funcionarios". Ea, otro granito de arena para que los ciudadanos nos adoren y traigan enriquecedoras experiencias a nuestro trabajo diario, especialmente a quienes estamos de cara al público.

Como periodista la sentencia del Tribunal Supremo me parece de lo más acertada. El director del medio, que por cierto ya no existe, pidió disculpas públicamente e incluso llegó a intentar corregir su desvarío con otra editorial mucho más esclarecedora. Y es de agradecer este profesional gesto en un mundo, el de la prensa, en el que ya es casi imposible ver rectificaciones o correcciones si no son previo paso por los tribunales y muchísimos años después.

El problema es cómo el enfoque superficial de una noticia con el ánimo de atraer el mayor número de visitas puede llevar a la confusión. Y nada mejor que leer el artículo que en su día publicó el periódico Levante para ver la diferencia entre una buena y una mala información. Y desde luego, es imperdonable (tal y como apunta el buena amigo de Fuencionario´s Blog) no leer los argumentos del genial Sevach al respecto.

Desde luego yo no voy a permitir que me insulten y en alguna ocasión, ante la subida de tono de algún ciudadano-talibán al otro lado del teléfono le he dicho que no aceptaba la falta de respeto y que si mi padre no me gritó nunca tampoco se lo iba a consentir a un cenutrio. Cuelgo el teléfono y que le den.

Ahora toca esperar...veremos cuánto tarda en llegar algún listo que me llama vago y a posteriori me cita al Tribunal Supremo.

Joan Martínez Vergel, otro "amigo" de los funcionarios


Nada mejor para comenzar el año que escribir sobre Joan Martínez Vergel, un simpático escritor/periodista/funcionario que en los últimos días pulula en la red como uno de los mayores conocedores de los entresijos de la Administración y más concretamente un gran sabueso rastreador de funcionarios. El 2009 nos ha traido un nuevo rebrote del conflicto palestino-israelí, muchos copos de nieve,más comentarios estúpidos de algunos políticos, pilotos tocapelotas y al gran Joan Martínez Vergel, que el Periódico de Cataluña (por poner sólo un ejemplo) lo describe como "conoce por experiencia los vericuetos de la Administración. Fue funcionario durante 15 años y esta etapa le ha proporcionado material más que de sobra para escribir el libro De 8 a 3. Anécdotas de funcionarios (Editorial Styria), que presenta hoy. La obra recopila un centenar de sabrosas historietas para echarse a reír y también para echarse a temblar."

Y si, os aseguro que no he podido leer aún el libro pero sì he tenido el orgásmico placer de leer sus entrevistas y paseos por los medios de comunicación...y es realmente para echarse a temblar.

Con la primera referencia al libro me cayó francamente bien. Ya había visto libros escritos por azafatas de vuelo (TCP), enfermeras, médicos, abogados, profesores y jueces relatando sus anécdotas, y me pareció francamente interesenta el asunto...hasta que cayeron en mis manos, ante mis ojos, las primeras entrevistas del Sr. Martínez Vergel. Una lectura completa hasta el último renglón de la entrevista en El Periódico ofrece una magistral teoría (al más puro estilo Txumari Alfaro) sobre la razones que llevan a los ciudadanos a pegarnos o insultarnos, "La gente que va a solucionar un problema no sabe si llevará todos los papeles y si el funcionario estará. Eso crea ansiedad y hay gente que ataca a los funcionarios". Ea, con dos, sin complejos.

Con funcionarios como Joan sobran los enemigos. Ha nacido una estrella.


Nota 1: en la foto un funcionario ruso simula estar durmiendo la mona para detectar vehículos que exceden la velocidad permitida gracias a una microcámara y miniradar colocado entre los agujeros del calcetín. Esto es ingenieo y lo demás son tonterías.

Nota 2: pido ayuda al Funcionario´s Blog, cuyo nivel de catalán creo que alcanza el nivel C (de cojonudo), para que me traduza el siguiente comentario sobre la entrevista de Joan Martínez, también publicada en El Periódico: ""Sempre t'emmascara una paella bruta". Refrany que et poden aplicar, especialments els que et coneixem i hem treballat amb tu. Que feies per evitar el que denúncies, quen éres cap de servei i càrrec de confiança ?. Predicar amb l'exemple essent el primer "esmorzador" de l'ajuntament?. "